Pequeña guía para meditar

Tómate un tiempo para meditar:

Busca tiempo suficiente en tu rutina diaria. Los efectos de la meditación son más perceptibles cuando lo haces con regularidad.

Se puede meditar en cualquier momento del día, algunas personas les gusta comenzar su día con la meditación, otros al final del día como para una limpieza de su mente, y algunos prefieren refugiarse en la meditación, en medio de un día ajetreado, para gustos no hay nada escrito, la cuestión es meditar. De todas formas el momento mejor para meditar es a primera hora de la mañana, y sobre todo en ese punto en que está a punto de salir el sol. No meditar inmediatamente después de una comida, o cuando es probable que tenga hambre.

Encontrar o crear una zona tranquila, ambiente relajante. Es especialmente importante, cuando estás empezando, para evitar cualquier obstáculo a la atención. Apaga todos los aparatos de televisión, teléfono u otros aparatos ruidosos. Si puedes poner música asegúrate de que sea tranquila, repetitiva como un mantra y suave, para no romper su concentración, la música es muy útil sobre todo para evitar que interrumpan tu concentración ruidos exteriores.

Siéntate a nivel de suelo en un cojín, si practicas yoga te sientas en postura fácil y sino siéntate cómodo en una silla o donde tu estés bien y no te incomode la postura. Lo importante es mantener la espalda recta, ya que esto ayudará a respirar más adelante.

Cualquier posición en que estés relajado, pero que su espalda esté recta es admisible, incluso acostarse, pero vigila en no dormirte.

Mantenga sus ojos a medio abrir, sin centrarse en nada. Si esto es demasiado difícil o te distrae, busca algo para céntrate por ejemplo la llama de una vela pequeña.

Respira profundamente y lentamente desde el abdomen, en vez desde el pecho. Esta respiración sirve para aliviar el estrés puede llevar a cabo por la inhalación de la cuenta de 3, exhalando por la cuenta de 6, repetir una y otra de 15 a 20 minutos Esto expulsa el aire utilizado y más completamente oxigena la sangre, disminuir la frecuencia cardiaca y presión arterial. Muchos pacientes con presión arterial alta han bajado la presión arteria, lo que les permite disminuir o eliminar la necesidad de medicación.

Relaja cada músculo de su cuerpo. No te apresures, y toma el tiempo necesario para relajarse totalmente. Hágalo poco a poco, empezando por los dedos de los pies, y subiendo a la cabeza, hasta que la tensión se desvanezca.

Enfoca tu atención. Puedes notar que tu mente quiere pasear, saltar de un pensamiento a otro, haciendo observaciones sobre otras cosas. Déjalo pasar y suavemente, pon la atención a un solo punto hasta que descanse allí de forma natural. El objetivo es reducir ese ruido en su mente poco a poco hasta que se desvanezca. Tu atención se ha de centrar en tu respiración, escúchala y no emitas juicios sobre ella.

En esta parte ya va a depender de cada uno y su evolución respecto a la meditación y el objetivo marcado, vamos a poner ejemplos simples para dar una pauta, Para superar el ruido verbal recitar un mantra, una sola palabra como "Aum", pronunciada en un ritmo constante es el mejor. Puedes recitar con sonido o sólo con la voz en su mente. Los principiantes pueden encontrar más fácil contar sus respiraciones. Trata de contar la respiración 1 a 10, entonces simplemente empezar de nuevo en 1.

Para eludir las imágenes que siguen introduciéndose en sus pensamientos, visualizar un lugar que lo calma. Puede ser real o imaginario. Imagínate que estás en la parte superior de una escalera que conduce a un lugar pacífico. Baja por las escaleras hasta que llegues y estés tranquilo y relajado.

El silencio: si has entrenado a tu mente a centrarse en una sola cosa a la vez, el siguiente paso es concentrarse en nada. Esto requiere una enorme disciplina, pero es el pilar de la meditación. Después de enfocarte en un solo punto como se describe en el paso anterior, puedes lanzarlo lejos, o observarlo de manera imparcial y deja que vengan y luego, sin etiquetarlo como "bueno" o "malo" y dejarlo pasar. Adoptar el mismo enfoque a todos los pensamientos que vuelven a su mente hasta que persevera silencio.